martes, 31 de marzo de 2009
lunes, 30 de marzo de 2009
sábado, 28 de marzo de 2009
MICHELLE, MA BELLE
viernes, 27 de marzo de 2009
miércoles, 25 de marzo de 2009
AL MENOS UN KILÓMETRO
martes, 24 de marzo de 2009
ANIVERSARIO DEL GOLPE DE ESTADO EN ARGENTINA
Hoy es el 33° aniversario del golpe de estado del 24 de marzo de 1976 y del inicio de la última dictadura militar en Argentina.
Entre mis obras hay una novela sobre la última dictadura militar argentina intitulada "Lejos en el tiempo" (con una versión teatral también).
Entre mis obras hay una novela sobre la última dictadura militar argentina intitulada "Lejos en el tiempo" (con una versión teatral también).
lunes, 23 de marzo de 2009
viernes, 20 de marzo de 2009
jueves, 19 de marzo de 2009
martes, 17 de marzo de 2009
lunes, 16 de marzo de 2009
sábado, 14 de marzo de 2009
OTRAS FRASES CÉLEBRES DE LOS JEFES DE LAS FARC
ALFONSO CANO
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viernes, 13 de marzo de 2009
jueves, 12 de marzo de 2009
miércoles, 11 de marzo de 2009
martes, 10 de marzo de 2009
lunes, 9 de marzo de 2009
viernes, 6 de marzo de 2009
EL COLLAR "HOGAZA DE PAN" DE EVO MORALES
Después del sombrero "hogaza de pan" y del traje de pan y flores ahora el collar "hogaza de pan".
Ver post "La elegancia de Evo Morales":
http://evomoralesaima.blogspot.com/2008/03/el-traje-de-manzanas-de-morales.html
Ver post "La elegancia de Evo Morales":
http://evomoralesaima.blogspot.com/2008/03/el-traje-de-manzanas-de-morales.html
jueves, 5 de marzo de 2009
miércoles, 4 de marzo de 2009
martes, 3 de marzo de 2009
lunes, 2 de marzo de 2009
FRANCISCO SANTOS COMO ROBERTO PINOCHO
Un cuento de mi colección de microrrelatos "Tragicómicogrotesco cotidiano":
ROBERTO PINOCHO
Mi amiga Annalisa tenía un novio llamado Roberto, cuyo sueño era llegar a ser policía. Los padres de este chico, sin embargo, no estaban de acuerdo que él entrara en la policía. Pertenecían a la media burguesía y querían que emprendiera una profesión más adecuada a su rango social.
Para contentar a sus padres Roberto renunció a su sueño y se matriculó en la facultad de jurisprudencia. Al mismo tiempo empezó a contar por ahí que era un policía, en un principio un inspector, luego un comisario. Después de un tiempo su imaginaria carrera en la policía no le bastó más y empezó a hacerse pasar por un carabinero y a veces por un agente secreto. Para probar que decía la verdad exhibía falsas tarjetas de identitad que él mismo realizaba.
Roberto también falsificaba su libreta universitaria para no hacer saber a sus padres que tenía exámenes pendientes. Además le enseñaba a Annalisa cartas que se escribía solo, fingiendo ser una mujer llamada Silvia que se había enamorado de él.
Mi amiga, cansada de las mentiras de Roberto, lo dejó. Yo lo apodé Roberto Pinocho.
Unos meses después leí en un periódico local la noticia que Roberto Pinocho, mientras estaba deteniendo y cacheando a personas a la salida de una discoteca haciéndose pasar por un miembro de las fuerzas del orden, había sido arrestado por verdaderos policías, que le habían secuestrado las falsas tarjetas de identitad y habían señalado su caso a la magistratura.
ROBERTO PINOCHO
Mi amiga Annalisa tenía un novio llamado Roberto, cuyo sueño era llegar a ser policía. Los padres de este chico, sin embargo, no estaban de acuerdo que él entrara en la policía. Pertenecían a la media burguesía y querían que emprendiera una profesión más adecuada a su rango social.
Para contentar a sus padres Roberto renunció a su sueño y se matriculó en la facultad de jurisprudencia. Al mismo tiempo empezó a contar por ahí que era un policía, en un principio un inspector, luego un comisario. Después de un tiempo su imaginaria carrera en la policía no le bastó más y empezó a hacerse pasar por un carabinero y a veces por un agente secreto. Para probar que decía la verdad exhibía falsas tarjetas de identitad que él mismo realizaba.
Roberto también falsificaba su libreta universitaria para no hacer saber a sus padres que tenía exámenes pendientes. Además le enseñaba a Annalisa cartas que se escribía solo, fingiendo ser una mujer llamada Silvia que se había enamorado de él.
Mi amiga, cansada de las mentiras de Roberto, lo dejó. Yo lo apodé Roberto Pinocho.
Unos meses después leí en un periódico local la noticia que Roberto Pinocho, mientras estaba deteniendo y cacheando a personas a la salida de una discoteca haciéndose pasar por un miembro de las fuerzas del orden, había sido arrestado por verdaderos policías, que le habían secuestrado las falsas tarjetas de identitad y habían señalado su caso a la magistratura.
No sé si Roberto Pinocho haya sido procesado y condenado. Ya no han hablado de él en el periódico.
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